
NOTA PERIODÍSTICA/HISTORIA DE LA TELEVISIÓN/MOMENTOS INOLVIDABLES.
Corría el día sábado 28 de diciembre de 1991, cuando se emitía el tradicional espacio de entretención «Sábado Gigante Internacional», en los momentos finales se presentó el grupo «Congreso» que interpretó uno de sus emblemáticos temas «Que nadie se quede sin estrellas», lo que denotaba la previa al término de año, no sin antes la participación de otros rostros del ámbito artístico de la época, como Alejandro de Rosas, Juan Antonio Labra, etc. También fue destacada por ese entonces, la participación del coanimador Eduardo «Guayo» Riveros Behnke que hasta ese momento seguía como conductor asistente del recordado espacio larga-duración de Canal 13, pues terminó dedicándose el resto de su carrera a seguir como hombre-ancla de Teletrece, espacio de noticias que se emite regularmente por la ex-estación católica.
Sucedió que en ese minuto, Don Francisco ya había dado por concluido el segmento de humor donde actuaron por ese entonces Fernando Alarcón, Malucha Pinto, Patricio Torres, Gonzalo Robles y Rebeca Ghigliotto, dándole paso en el tramo final del programa, precisamente a Congreso, que interpretó el recordado tema. En el momento de la canción, Francisco Sazo y sus compañeros de banda cantaron junto a los otros artistas que participaron en el espacio, entre ellos donde efectivamente se sumo la voz de Alejandro de Rosas, Álvaro Scaramelli y Juan Antonio Labra, sumándose también dos voces femeninas que participaron en el show de ese día, como siempre acompañados por la orquesta del Maestro Valentín Trujillo que cerraron en un gran aplauso.
Al término de la actuación, Don Francisco hizo mención a la partida de «Guayo» Riveros que dejaba en ese momento su rol de coanimador del espacio para seguir adelante como presentador de las noticias, también emitidas por la estación de Inés Matte Urrejola 0848 en el que destacó su rol como comunicador y donde señaló que además estaba estudiando Periodismo (tenía una formación previa como Profesor de Educación Física), y se le hizo entrega de un galvano por su permanencia en el programa.
Ahora bien, lo que parecía como una broma del Día de los Inocentes y se hallaba camuflado, que simplemente coronó el momento de cierre del programa, llegó en pocos minutos: Riveros hizo una mención encubierta al «doble motivo para celebrar» aludiendo al cumpleaños de Don Francisco, en cuya ocasión lo saludó una modelo del programa por sus 51 años de vida (el animador nació en Talca en 1940). Luego de la despedida de Eduardo Riveros, entra un equipo de productores del programa *que le tenían una sorpresa al saludarle por su cumpleaños y felicitarlo por un año más de vida, momento en que la orquesta del Maestro Valentín le cantó el «Cumpleaños Feliz» siendo felicitado por todo el equipo y los artistas del programa, que para ese minuto se habían presentado en esa emisión.
En tanto, la improvisación musical cumpleañera siguió con una letra adaptada e improvisada por el mismo animador, en la que se agregaron los buenos deseos para 1992. Así, el espacio de entretención sabatina terminó en medio de los créditos finales y su clásica característica de cierre «Gigante Show», compuesta por el fallecido trompetista uruguayo Daniel Lencina, habitué y compañero de labores de Don Francisco. De este modo, Mario Kreutzberger -nombre real del animador- celebra hoy su cumpleaños número 84, cuyo motivo es hoy de gran homenaje para su vida y su dilatada trayectoria en la televisión chilena y latinoamericana. ¡Feliz Cumpleaños, Don Francisco!
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