NOTA PERIODÍSTICA/COMENTARIO/JUEGOS OLÍMPICOS/PORMENORES DEL DEPORTE.

Reiniciamos este espacio de opinión de «El Cablegrama» con algunos de los mejores momentos como de los últimos movimientos que ha tenido estos días París 2024, sobre todo en un contexto en el que todo puede pasar y donde incluso, las cosas más insólitas pueden salir a la luz en el momento más inesperado.

Sin embargo, desde la capital francesa donde efectivamente aún está todo pasando en torno a las competiciones, también hay momentos memorables, que en especial para nuestro país vale la pena destacar. Tal es el caso de la deportista nacional Francisca Crovetto que este fin de semana logró su primera medalla de oro en la categoría del tiro skeet que al mismo tiempo incluye un premio agregado en dinero, el cual es otorgado por el IND (Instituto Nacional del Deporte), siendo un nuevo logro que recientemente tiene a su haber y que la ensalza como la nueva triunfadora de este encuentro olímpico representando a Chile, significando una gran alegría para todo nuestro país que ha sido testigo de este éxito tanto desde París como para los miles de espectadores que han seguido este momento por las pantallas.

Es por ello que esta deportista de 34 años se lleva dos nuevos logros a casa, siendo un verdadero refuerzo positivo para continuar con su carrera deportiva adelante, así como lo han hecho otros de sus colegas nacionales en cada una de sus disciplinas, lo que como sabemos nos enorgullece a todos.

Sin embargo, entre tantos reconocimientos y vítores por cada triunfo obtenido por los deportistas, en la Ciudad Luz también hay momentos un tanto variopintos que de una u otra manera, han hecho eco en la opinión pública siendo uno de esos la eventual competición en categoría de box femenino, donde la representante de Italia Angela Carini, tras enfrentarse a su contrincante argelina Imane Khelif, fue abatida por esta última a los 46 segundos del combate, lo que provocó que la italiana rompiese en llanto y decidiera abandonar el ring…y no sólo eso, también decidió retirarse del boxeo amateur tempranamente. El caso es que Khelif según acusaciones de algunos sectores tiene altos niveles de testosterona lo que motivó los fuertes golpes de guante en contra de Carini. Más aún, considerando sus rasgos físicos y las pruebas de testosterona pasadas y sus características genéticas intersexuales. Ello motivó además una rápida defensa del Comité Olímpico Internacional (COI), quien habló a su favor en medio de una disputa con la Asociación Internacional de Boxeo, tanto en aspectos de dirigencia y normativos.

Consecuentemente, la polémica fue tal que Khelif sufrió un imparable acoso por redes sociales donde se le criticaron sus «niveles de testosterona» en razón del derechazo que le propinó a su rival italiana y la prueba de género anterior no superada en el Campeonato Mundial de Boxeo.

Lo que sí se sabe es que la púgil argelina es una mujer cis género que tiene un trastorno hormonal. De nada valió el querer estrechar la mano a Carini, quien se negó a su saludo compensatorio, ya que era evidente que se había visto afectada tras el ataque, a la vez que los acosos hacia la deportista norafricana por RSS se hicieron cada vez más imparables.

En razón de esto, la deportista salió al paso por medio de un video donde declaró:

“Envío un mensaje a todos los pueblos del mundo para que respeten los principios olímpicos y la carta olímpica, para que se abstengan de acosar a los atletas, porque esto tiene consecuencias enormes. Puede destruir a las personas, puede matar los pensamientos, el espíritu y la mente de las personas, puede dividir a las personas, y por eso les pido que se abstengan de acosar”.

Y por último, otro momento nefasto que dio que hablar en el panorama olímpico, fue la expulsión de la nadadora brasileña Ana Carolina Vieira del certamen parisino, pues se arrancó junto a su pareja sin permiso de la zona exclusiva destinada a los competidores, cuyo hecho sucedió en medio de la ceremonia de apertura del evento deportivo y cuando le pidieron explicaciones, ella reaccionó de forma insultante, motivo por el que se convocó una reunión urgente por parte de la organización, en este caso el Comité Olímpico Brasileño, quienes determinaron su expulsión y su vuelta inmediata a Brasil. En tanto su compañero, Gabriel Santos pudo seguir compitiendo ya que admitió oportunamente su error. Vieira tras esto, si bien tuvo un día para competir quedando en duodécima posición de relevos 4×100 metros estilo libre, debió volver obligadamente a su país tras ser expulsada del certamen olímpico por mostrar una actitud insultante hacia la dirigencia.

“Cometimos el error de no realizar la comunicación de la manera adecuada como lo exige la Guía de Deporte Seguro, por lo que fuimos advertidos. No nos comunicamos porque, a pesar de estar fuera de la Villa, toda la logística del viaje se realizó a través de los medios proporcionados por la organización. Llevamos más de 3 años viviendo juntos, estos son nuestros segundos Juegos Olímpicos juntos, somos del mismo club, siempre hemos separado muy bien nuestra faceta personal y profesional, y todo aquel que nos conoce y vive con nosotros lo sabe muy bien”, fueron las declaraciones que la pareja hizo posteriormente en un comunicado.

Todos estos son detalles que hasta en las más resonadas e importantes competencias, suelen ocurrir o descubrirse y más en un contexto deportivo de amplia concurrencia y que es seguido en buena parte del mundo, que -sabiendo que no es raro- dé lugar a un sinnúmero de comentarios que muchas veces termina en boca de todos llegando incluso a la repercusión masiva y controversia en muchos casos despiadada para con los hechos sucedidos.